Israel.

Pocos lugares inspiran tanta pasión como Jerusalén, una ciudad de culto para judíos, cristianos y musulmanes. En nuestro viaje por la capital israelí, visitamos la Basílica del Santo Sepulcro, el Muro de las Lamentaciones y la Cúpula de la Roca, el tercer santuario más importante del Islam.

El Santo Sepulcro es uno de los centros más sagrados del Cristianismo. Siempre según los Evangelios, allí se produjo la crucifixión, enterramiento y resurrección de Cristo

El Muro de las Lamentaciones es el último vestigio del Templo de Jerusalem, el edificio más sagrado del judaísmo. Frente a él, se lamenta la destrucción de la ciudad y la dispersión del pueblo hebreo. La tradición de introducir un pequeño papel con una plegaria entre las rendijas del muro tiene varios siglos de antigüedad.

La Cúpula de la Roca, es un templo islámico situado en el centro de la Explanada de las Mezquitas, fue construido entre los años 687 y 691 por el noveno califa Abd Al-Malik, y los musulmanes consideran que fue el lugar desde donde Mahoma subió al cielo para reunirse con Alá.

Después de la visita cultural por el centro histórico, nos acercamos hasta el Mar Muerto. Situado a 416 metros bajo el nivel del mar, se trata del lugar más bajo de la Tierra y es aproximadamente diez veces más salado que los océanos, lo que hace que flotes en el agua y no te hundas. Allí también aprovechamos para darnos uno de esos típicos baños en barro, que tanto bien hacen a nuestras “skins”.

LM : Jerusalem